Hoy conoceremos la historia de 5 matrimonios desastrosos, sangrientos y cuyo final está lejos de los cuentos de hadas ya que en la vida real los matrimonios eran típicamente transacciones comerciales. La expectativa de casarse por amor es en realidad un fenómeno relativamente moderno, y la mayoría de la realeza a lo largo de la historia celebró matrimonios arreglados. Ya sea para consolidar el territorio o construir alianzas con casas rivales, la realeza dependía de los padres y asesores para encontrar un cónyuge adecuado y planear una boda, y en consecuencia a menudo seguían sus cabezas en lugar de sus corazones en el matrimonio.
George I de Gran Bretaña
y Sophia Dorothea de Celle
Antes de convertirse en rey británico, George I gobernó y radico lo que hoy es Alemania y
como cualquier hombre poderoso de la época en 1682, la madre de George arregló
para que se casara con la muy rica Sophia Dorothea de Celle, una noble Alemana,
naturalmente los jóvenes no se quisieron y el matrimonio fue infeliz, George
como todo aristócrata tenia numerosas amantes pero a diferencia de otros no le
gustaba la discreción y las paseaba frente a su joven esposa.
Hasta ese momento todo iba de acuerdo a lo que se
acostumbrara pero las cosas se complicaron
cuando Sophia trató de encontrar su propia historia de amor y comenzó
una relación extramarital con Philip
Christoph von Königsmarck, un conde sueco.
Cuando George se enteró de tan grande ofensa enfrentó a su
esposa a pesar de no haber sentimientos entre ambos la conversación subió de tono
a tal grado que George atacó físicamente a Sophia y comenzó a golpearla,
obviamente todo el asunto aunque causo un pequeño escandalo no tuvo ninguna
consecuencia para George quien ofendido alejo a Sophia de cualquier cargo de
poder o cualquier beneficio y se divorció de ella en 1694 encarcelándola por el
resto de su vida. Por otro lado el amante sueco Königsmarck fue asesinado por su amor por
Sophia así que la historia no termino bien
para nadie excepto para George quien se convirtió años más tarde en Rey
de Gran Bretaña .
Isabel de Francia y Eduardo II de Inglaterra
La reina Isabel de Francia tenía alrededor de 12 años cuando
se casó con el rey Eduardo II de Inglaterra en 1308. Aunque la relación tuvo
momentos felices al principio, la obsesión de Eduardo por sus favoritos provoco
que el matrimonio callera en una mala racha, y que los rumores señalaras que Isabel no era capaz de
entretener a su esposo quien prefería la compañía masculina, el orgullo de
Isabel quedo hecho pedazos y se alejó de Eduardo para comenzar una aventura con
Roger Mortimer, y con su ayuda lanzó un golpe de estado exitoso contra su
esposo. Eduardo pronto fue encarcelado, y en 1327 murió misteriosamente.
Carolina de Gran Bretaña y Cristian VII de Dinamarca
Caroline Matilda era una hermosa princesa británica de 15
años nada menos que la hermana menor de George III, quien le ordeno casarse con
el rey Christian VII de Dinamarca en 1766. Hasta el momento el destino de Carolina
no parecía fuera de lo común pues en Dinamarca la esperaba un joven Rey que le tenía un palacio lleno de
joyas, un trono y bailes, pero la joven
se encontró común esposo que sufría de
inestabilidades mentales severas que llevaron su frágil relación al límite. Y
es que aunque Christian tenía una enfermedad durante sus crisis podía llegar a
ser extremadamente cruel, incluido el
momento en que le hizo saber a Caroline Matilda lo que pensaba de ella al
colocar el retrato de su nueva esposa en un lugar destacado en el baño.
También era conocido por sus adicciones sexuales y paranoia,
Carolina no recibió comprensión de su familia si en cambio del médico real el Dr. Johann Friedrich Struensee quien además junto a Carolina tomó las riendas
del gobierno, promulgó reformas ilustradas al tiempo que se hacían amantes,
lógicamente las cosas no terminaron bien para ninguno de ellos: Struensee fue
expulsado y ejecutado y Carolina fue enviada al exilio y murió a la edad de 23
años.
George IV de Gran Bretaña
y Carolina de Brunswick
Desde su juventud era bien sabido y aceptado que George, estaba más interesado en cortejar a
las amantes, encargar edificios impresionantes y acumular deudas de juego que en
sus deberes, así que acumulo deudas que solo podían solventarse con un
matrimonio que su padre acordó para él , no es necesario decir que con sus
acciones cualquier unión habría
terminado siendo un fracaso, pero su matrimonio además causo un escándalo su
esposa además era su prima se trataba de nada menos que la princesa Carolina de
Brunswick.
Los jóvenes se odiaron
desde el día que se conocieron, Carolina señalo que era mas gordo que en los retratos y George la acuso de ser poco femenina y poco agraciada, y
la noche de bodas del 8 de abril de 1795 fue un desastre , se dice que George se quejo amargamente de su deber y lloraba en momentos, al final Carolina se quejó
públicamente de que George estuviera tan borracho.
El asunto fue medianamente controlado por las familias y la pareja casi como un milagro logro un embarazo, y Caroline dio a luz a la princesa Charlotte.Con el paso del tiempo quedo claro que sus diferencias eran gigantescas y muchos miembros de la corte señalaban que Caroline bailaba con muchos hombres a los que tocaba e instaba, George por su parte seguía tomando en exceso y adquiría cada vez mas amantes hasta que finalmente la pareja se separó y, una vez que George se convirtió en rey en 1820, sorprendiendo a Gran Bretaña al intentar divorciarse de su esposa a quien termino desterrando en 1799 a una residencia privada, ella lejos de angustiarse se dedico a tener diferentes amoríos y a disfrutar un buen estilo de vida .
Pedro el Grande y Eudoxia
Pedro I de Rusia paso
a la historia y es recordado como "el Grande", pero su historia menos
conocida fue la que vivió con Eudoxia con quien se casó en 1689 en una boda que
la madre de Pedro había negociado.
La pareja vivió de acuerdo a las costumbres trayendo al
mundo a tres hijos, pero las cosas se
volvieron frías y Pedro alejaba a su esposa públicamente a quien acusaba de
aburrida y fría, no solo en un nivel personal por el contrario políticamente
hablando a Pedro loe molestaba que su esposa fuera tan conservadora y se
opusiera a sus políticas acusándola de una serie de conspiraciones en su
contra, entonces no se esperaba que el Zar tomara alguna acción política o
definitiva, pero todo llego a un punto de quiebre y Pedro sorprendió a propios y extraños cuando en
1698, después de nueve años de matrimonio, consiguió el divorció de Eudoxia y la envió a
un convento. Con su primera esposa fuera de escena, Pedro se casó en secreto
con su amante campesina unos años más tarde.